martes, 29 de diciembre de 2015

Guaguas y perros

Me he dado cuenta de algo.

La gente tiene guaguas como tiene perros.

Le gustan los perros porque son tiernos de cachorritos, pero se olvidan de que luego crecen.

La gente tiene guaguas porque encuentran tiernas las guaguas, pero se olvidan de que se convierten en niños y luego en adolescentes.

 

ODIO SER MUJER

Odio ser mujer. Odio tener que ser perfecta, odio tener que usar el pelo largo para que me contraten en un puto trabajo, odio que me paguen menos porque tengo útero, odio que por tener útero tenga que cumplir con la obligación de ser madre, odio que al confesar que no quiero ser madre me miren como la séptima bruja del aquelarre, como la que odia a los niños cuando es todo lo contrario.

Odio ser mujer, odio tener que usar tacos para ser aceptable en una fiesta y... EN LA VIDA! Odio tener que usar ropa apegada al cuerpo y odio que la gente piense que soy lesbiana si uso ropa ancha y cómoda.

Odio tener que ser gracil y delicada pero que me miren como una imbécil tarada si soy precisamente eso. Odio ser mujer cuando un hombre me mira raro por ser capaz de levantar 20 kilos de peso. Odio que me miren raro si compro pesas pero que luego me critiquen si tengo brazos de murciélago -ya saben, cuando se tiene la piel fláccida bajo la parte superior de los brazos- , odio tener que hacer el doble de ejercicio que un hombre para poder sudar y empezar a quemar grasas, odio lidiar con la regla todos los meses y que la puta cosa me dure una semana completa porque al parecer soy hiperfértil. Odio no poder ser amable con un hombre porque altiro piensa que quiero encamarme con él y que si no soy amable soy una puta arrogante. Odio tener que andar explicando que no estoy enojada sólo porque no ando con una sonrisa de diez metros en la cara, cuando lo que estoy sintiendo es nada porque estoy pensando.

Odio ser emocional y que luego me critiquen si no lo soy. Odio tener que disculparme por mis lágrimas, odio no poder ser expresiva y que luego me critiquen si no lo soy.

Soy mujer y odio tener que comer poco porque si como normal engordo y la sociedad me juzga.

ODIO COMER POCO, ODIO COMER POCO, ODIO COMER POCO.

Odio que me elogien una y otra vez diciéndome que estoy más delgada y que luego se quejen si no como. Odio tener un metabolismo de mierda sólo porque mi cuerpo está programado para reservar grasas para el hijo en potencia, ya que aparentemente lo que más importa de mi organismo es el hecho de poder hacer bebés.

Odio que me pasen preguntando por "¿cuándo el novio?", odio que me miren raro si hablo de sexo, odio que piensen que me encamo todos los días sólo por hablar de sexo con soltura. Odio ser vista cómo frígida si no hablo de sexo en lo absoluto. Odio que todos piensen en sexo cuando me ven, ya que aparentemente las mujeres estamos hechas para complacer a los hombres.

Odio depilarme las piernas, las cejas, las axilas y mi entrepierna. Odio tener pies pequeños y dolientes. Odio que las otras mujeres se escandalicen cuando les digo que podemos complacernos a nosotras mismas. Odio que la sociedad nos enseñe todos los días que primero debemos complacer a los hombres y segundo a... ¡Los hombres! Odio que no se nos hable del clítoris, de la masturbación y de cómo es importante complacer nuestros deseos y sueños primero que los de un hombre. Odio que se sexualice mi género y que no se nos vea como personas primero que como mujeres.

Odio que sexualicen a las lesbianas y que luego las rechacen por ir "contra natura". Odio ser mujer y que la TV trate de convencernos a todas de que la manera en que lucimos no es suficientemente sexy. Odio que los medios nos enseñen a odiarnos entre nosotras y que es bueno pelearse con una compañera por el amor de otro hombre. Odio que se nos venda una idea del romanticismo que no existe y que los hombres nos digan palabras bonitas para meterse en nuestros calzones.

Odio ver una película como la cinéfila que soy y que en un reparto de 30 haya sólo dos mujeres. Odio ver una película "para mujeres" y que trate sobre matrimonios, peleas entre mujeres, infidelidad, quien se acostó con quien, 10 maneras de dejar al novio, blah, blah, blah. Odio que todas las actrices tengan que lucir anoréxicas mientras que de los actores hay de todas estaturas y tamaños. Odio ver una película y no poder identificarme con ningún personaje femenino porque todos los personajes femeninos son descerebrados, torpes y parlanchines. Odio ver una película y ver cómo se sexualiza a las mujeres de color y que se las llame "exóticas" sólo por no ser blancas. Odio ser mujer y ver cómo todos los personajes femeninos son gráciles, delicados e inútiles cuando el 99% de los trabajos forzosos y repetitivos en el mundo son hechos por mujeres.

Odio que se nos vea como el sexo débil cuando somos las que hacemos todo en la casa.

Odio ser mujer y que los que lideran los trabajos supuestamente femeninos en el mundo -cocina, baile y canto- sean hombres.

Odio que se sexualice a las cantantes mujeres mientras los hombres son valorados por su talento y no por su cuerpo.

Odio que mi madre me diga que debo aprender a cocinar para poder preparar platos ricos para mi marido cuando me case, y no para ser capaz de alimentarme primero a mí misma. Odio tener que hacer el aseo mientras que a los hombres se les deja tranquilos para que estudien y se realicen como personas. Odio que crean que estoy disponible para todos sólo porque soy mujer. Odio que por ser mujer me interrumpan con sus ocurrencias, ideas y grandes planes cuando yo también tengo grandes planes y sueños.

Odio, de nuevo, usar el pelo largo por el bien de conseguir trabajo, porque si uso pelo corto piensan que soy lesbiana y si soy lesbiana creen que me voy a violar a todas las alumnas -soy profe- . Odio ser mujer y tener que andar perfecta siempre, tener que usar tacos siempre, de nuevo, para que luego me critiquen si me tuerzo el pie cada dos por tres por usar taco.

ODIO SER MUJER, Y ODIO ODIAR SER MUJER. Odio recordar cómo me importaba una raja serlo cuando era chica y todavía no era un objeto sexual para esta sociedad. Odio odiar ser mujer y amar mis emociones y mi instinto femenino y mis piernas largas. Odio odiar ser mujer porque cuando era niña e infértil me valía madre serlo porque era una persona primero y una mujer después. Porque podía jugar brusco sin que los adultos se asustaran y pensaran que me iba a romper en dos. Odio ser mujer y que no me dejen hacer cosas forzosas porque creen que soy de cristal. Odio que me abran la puerta y que me miren raro si les abro la puerta a ellos. Odio ser mujer y que me regañen por herirme al caer o al tropezar. Odio ser mujer y que se me prohíba hacer cosas sólo porque soy mujer. Odio no poder caminar por la calle de noche sin riesgos de ser violada. Odio que se me haya dicho desde los doce años que tenga miedo de los hombres. Odio tener miedo todo el tiempo, odio sentirme vulnerable. Odio que se me vea como alguien menos mientras tengo conciencia de que somos el sexo más valiente y resistente de los dos, aunque no tengamos músculos ni voz fuerte. Odio no poder enfurecerme sin que me llamen histérica. Odio no poder alzar mi voz y que cuando lo hago las otras mujeres me llaman feminazi por pelear por sus derechos.

ODIO ODIAR SER MUJER.



¿Qué es la Unanimidad?

Es esa tendencia del ser humano a desear que todos los que le rodean entren en una cajita con una etiqueta que ellos aprueben. Si uno no entra en ese cajita, uno es rechazado socialmente.
Tenemos que destruir esa cajita, porque el ser humano es complejo por naturaleza. Todos somos diferentes y aceptables, a menos que uno sea un sacoehuéa abusivo con tendencias dictatoriales.

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